“Mitad hombre, Mitad máquina, todo policía”
FICHA TÉCNICA
Dirección-Paul Verhoeven
Guión-Edward Neumeier/Michael Miner
Fotografía-Jost Vacano
Música-Basil Poledouris
Producción-Arne Schmidt
INTERPRÉTES
Peter Weller (Alex Murphy/Robocop)
Nancy Allen (Anne Lewis)
Ronny Cox (Dick Jones)
Kurtwood Smith (Clarence J. Boddicker)
Miguel Ferrer (Bob Morton)
Robert DoQui (Sargento Warren Reed)
Dan O´Herlihy (Director OCP)
SINOPSIS
Con el fin de acabar con la delincuencia que azota la ciudad de Detroit, la corporación OCP aprueba la creación de un cyborg mitad robot mitad hombre, para cuya creación utilizan el cuerpo del agente Murphy, abatido en acto de servicio. Sin embargo, este robot mantiene la memoria del policía asesinado y decide cobrarse venganza de los hombres que acabaron con su vida.
CRITICA
Paul Verhoeven acertó de pleno en su primera producción netamente americana para, partiendo de una historia que en cualquier otras manos habría dado lugar a una cinta más de acción de serie Z tan en boga en los ochenta, crear una obra madura de ciencia ficción llena de elementos de interés y con un éxito tal que generó dos secuelas, amén de una serie para televisión, otra de dibujos, y con un remake para 2013 ya rodado.
Verhoeven, como es habitual en su filmografía, hace un uso de la violencia real y descarnada, alejándose de la estilización en las secuencias de acción, aprovechando además para ubicar varias críticas a la sociedad norteamericana fácilmente identificables dentro de la trama netamente de acción.
La película utiliza con suma inteligencia el ajustado presupuesto con el que contó la producción, no hablando de ningún año en concreto pero insinuando que la acción se desarrolla en un futuro cercano, lo cual unido a un inteligente uso de medios, evita que la cinta haya envejecido más que lo inevitable en una película de hace veinticinco años ya que fue rodada. Especialmente destacable además es el trabajo de Rob Bottin en el diseño de Robocop, que mantiene intacto todo su impacto y que convirtió de manera casi inmediata al robot protagonista en ícono a la altura de Terminator o Alien entre otros seres del fantástico contemporáneo.
Basil Poledouris compone para la ocasión una pieza central que se convertiría en una de esas melodías fácilmente identificables con ese toque épico tan habitual en la obra del compositor griego.
Peter Weller ejerce de perfecto protagonista, dotando a Robocop del rostro perfecto (mandíbula cuadrada y de rasgos marcados) además de realizar un estupendo rol tanto en los movimientos como en la limitada expresividad del personaje. Junto a este destaca la presencia de Nancy Allen como compañera del agente asesinado y Ronny Cox como villano de la función.
Una obra para revisar que no ha perdido ni un ápice de todas las cualidades que la convirtieron la cinta en una de las más taquilleras el año de su estreno.
Escena: La muerte de Alex Murphy, una secuencia que a día de hoy mantiene viva todo su trágico efectismo.
Puntos Fuertes: El diseño de Robocop del genial Rob Bottin y una partitura musical de Basil Poledouris excelente y que todo buen aficionado identifica con tan solo dos acordes.
Puntos Débiles: Los trucajes con maquetas y animación fotograma a fotograma en los que participa el RP-209 no han envejecido demasiado bien y a día de hoy resultan algo toscas.
Curiosidad: A pesar de su violencia, Verhoeven se vió obligado a recortar el montaje de su película por varias veces para evitar una calificación que hubiera afectado a la carrera comercial de la cinta.
La Frase: “Vivo o muerto, tu vendrás conmigo” (Alex Murphy/Robocop)
Valoración: 9 (Clásico de culto innegable de la década de los ochenta)
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