“Nadie
puede librarles del pasado, sangre y sexo corren por sus venas”
QUIEN
LA HACE:
Un desconocido P. J. Pesce, afincado en las series para televisión y director
de otra secuela sobre vampiros, en este caso de Jóvenes ocultos. Robert Rodríguez
sigue detrás del proyecto como productor y co guionista de la historia,
Tarantino solo produce.
QUIEN
SALE:
Podemos destacar algún nombre interesante como el de Temuera Morrison, el Jango
Fett en la segunda trilogía de Star Wars, Michael Parks, uno de los actores
fetiche de Quentin Tarantino y que ya en la primera entrega diera vida al
Ranger McGraw, personaje a quien volveríamos a ver en películas posteriores como
Planet terror o Kill Bill o la pelirroja
Rebecca Gayheart (Leyenda urbana). Atención a las apariciones de la mítica
Sonia Braga y del director de cine Kevin Smith. Danny Trejo no podía faltar
repitiendo papel.
QUE
ME GUSTA:
Trata de seguir el camino marcado por la primera entrega en este caso
fusionando el género vampírico con un primer acto donde prima el spaguetti
western, lo que es de agradecer. Forma junto a las dos entregas anteriores una trilogía
que da lo que promete en una saga a la que se le toma cariño. Para los más
observadores tiene muchas referencias a personajes reales y otros elementos que
pueden servir de aliciente a la hora de revisitar la película.
QUE
NO ME GUSTA:
La falta de medios y de una dirección más competente pesa y acaba afectando al
producto final. A nadie le importan los acontecimientos previos a la llegada de
los protagonistas a nuestro bar de carretera favorito.
LA
ESCENA:
El susto con el niño, te pilla con las defensas bajas.
UNA
CURIOSIDAD:
La cinta se rodaría prácticamente paralelamente a la segunda entrega de la saga.