“Las puertas del infierno han sido abiertas en...”
FICHA TÉCNICA
Dirección-John Frankenheimer
Guión-Ron Hutchinson/Richard Stanley
Fotografía-William A.Fraker
Música-Gary Chang
Producción-Edward R. Pressman
INTERPRÉTES
Marlon Brando (Dr. Moreau)
Val Kilmer (Montgomery)
David Thewlis (Edward Douglas)
Fairuza Balk (Aissa)
Ron Perlman (Maestro de la Ley)
Temuera Morrison (Azazello)
SINOPSIS
Edward Douglas es un trabajador de Naciones Unidas que tras sufrir un accidente de aviación permanece varado en alta mar en una balsa de emergencia. Es rescatado por un barco que le traslada a una inhóspita isla en medio del Océano donde el conocido Dr Moreau, ganador del Premio Nobel, desarrolla sus experimentos para lograr un ser humano superior en la clandestinidad.
Fallida revisión del clásico de H.G.Wells que ya había sido adaptado a la pantalla de cine en varias ocasiones con anterioridad. Su principal problema estriba en una narración confusa que se inicia en el marco del suspense para finalizar en una pirotecnia vacía y sinsentido. Fruto de ello es que John Frankenheimer (autor con una solvencia mas que refutada) heredara el proyecto tras el fulminante despido del director de partida, Richard Stanley, lo que devino en una falta de control por parte del director de Nueva York.
A este hecho hay que sumar el tremendo error de casting a la hora de contar con Marlon Brando como reclamo principal, ya que el actor de El Padrino realiza una interpretación vacía y en la que no hay esfuerzo alguno por parte de Brando. Si a esto sumamos un horrible Val Kilmer, aún más pasado de rosca en su interpretación que de normal, el resultado es insalvable, a pesar de los esfuerzos de David Thewlis, el mejor del terceto protagonista. Junto a ellos Fairuza Balk añade su belleza felina a un papel a su medida y el habitualmente acostumbrado a soportar complejas sesiones de maquillajes (Hellboy o En busca del fuego entre otros títulos) Ron Perlman.
Si hay un elemento destacable del presente título ese es el logrado trabajo de maquillaje a la hora de mostrar las diferentes criaturas que pululan por la isla, a cuyos paisajes naturales tampoco se le sabe sacar el partido que ofrecen.
Una de las últimas cintas de John Frankenheimer (fallecido en 2002), que, al carecer este de un control total sobre la producción, se convierte en un título de carácter meramente alimenticio del director de, entre otras cintas, El mensajero del miedo, French Connection 2 o El pacto de Berlín.
Escena: El Dr Moreau sorprende en la cabaña a varias de sus creaciones en una secuencia que aboga por el suspense y que tiene un trágico final.
Lo mejor: Los notables trabajos de maquillaje obra de Stan Winston.
Lo peor: Los lamentables trabajos tanto de Marlon Brando (quien ni siquiera se esfuerza por interpretar su papel) como de un Val Kilmer sobreactuado hasta el límite.
Curiosidad: Bajo la espesa capa de maquillaje de Lo-Mai, la criatura sacrificada por incumplir la Ley, se esconde Mark Damascos, conocido actor de acción de serie B (Crying Freeman, los paraísos perdidos)
Valoración: 5/10