DE QUE VA: En el
año 2127 en la estación espacial Minos un droide dirigido por el científico
Paul Merchant manipula el cubo conocido como “La configuración del lamento”
hasta que logra desentrañar el puzle para instantes después acabar deflagrando.
QUIEN LA HACE: Primera
y única película dirigida por el experto en efectos especiales Kevin Yagher
(quien ha trabajado en el departamento de efectos de sagas como Viernes 13,
Pesadilla en Elm Street, Muñeco diabólico o Los chicos del maíz), quien acabo
firmando bajo el pseudónimo de Alan Smithee al no estar de acuerdo con el
remontaje sufrido por la película. Peter Atkins sigue escribiendo la historia y
Clive Barker aquí aún intentaba tirar de la franquicia.
QUIEN SALE: Destacar
a las dos protagonistas femeninas, una Valentina Vargas famosa por su papel de
mendiga en El nombre de la rosa y Kim Myers, protagonista de la segunda entrega
de Pesadilla en Elm Street. Doug Bradley continua dando vida a Pinhead, lo más
destacable a nivel interpretativo siendo de hecho premiado en algún festival
especializado.
QUE ME GUSTA: Toda la
trama pretérita que narra la creación de la caja y su primer uso es la más atinada
y cercana al espíritu inicial de la saga. La cenobita a la que da vida
Valentina Vargas está lograda a nivel de diseño, recordándonos de alguna manera
a la cenobita hembra de la primera entrega.
QUE NO ME GUSTA: Se
pierde ese aura malsano y tan propio de Clive Barker y su universo literario y
cinematográfico, convirtiéndose ya de manera abierta a Pinhead en el nuevo
Krueguer o Vorhees de turno. La innecesaria mascota de Pinhead. Le sucede algo
que aún no había pasado en la trilogía anterior, tiene pasajes aburridos.
LA ESCENA: La
tortura infringida por Pinhead a la pareja de guardias de seguridad gemelos y
que acaba con ambos reconvertidos en unos apegados cenobitas.
UNA CURIOSIDAD: Joe Chappelle,
director de la sexta entrega de Halloween o Phantoms fue el encargado de rodar las
escenas de relleno para remontar todo el trabajo de Yagher, quien por cierto
había plasmado una visión más cercana a lo que realmente quería Barker.
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