miércoles, 30 de marzo de 2011

ANIMADORAS ASESINAS (Cheerleader camp, 1988) 84´





“Give me a K
Give me a I
Give me a L
Give me a L”

FICHA TÉCNICA

Dirección -John Quinn
Guión -David Lee Fein/R.L.O´Keefe
Fotografía -Bryan England
Música -Joel Hamilton/Murielle Hamilton
Producción -Jeff Prettyman/John Quinn

INTERPRÉTES

Betsy Russell (Alison Wentworth)
Lucinda Dickey (Cory Foster)
Leif Garrett (Brent Hoover)
George Flower (Pop)
Lorie Griffin (Bonnie Reed)
Travis McKenna (Timmy Moser)

SINOPSIS

Un campamento reúne a varios equipos de animadoras en una competición donde se elegirán entre otros premios a la mejor animadora de verano. Varias de las concursantes irán siendo asesinadas sin que esto sirva para entorpecer la celebración del concurso.

Una más de las miles de variantes slasher nacidas a raíz del éxito de la saga de Viernes 13 y que en conjunto es bastante banal y absurda.

Hay que partir del hecho de que prácticamente una hora de metraje se inscribe en el género de comedia gamberra tan propia también de la década de los ochenta caracterizada por un humor de corte grueso y una tendencia al abuso en los desnudos femeninos. Pero ni siquiera como comedia funciona, ya que carece de gracia alguna (exceptuando la escena marcada al final).

Solo en su ultimo tramo nos encontramos con que el director apuesta por un mayor uso de la sangre y los asesinatos, aunque los modestos trucajes tampoco ayudan a que destaque en este apartado. Y la supuesta idea de engañar al espectador con la identidad del asesino no funciona con nadie que haya visionado media docena de títulos de género.

En cuánto a las interpretaciones, si bien hay que destacar la belleza de las protagonistas femeninas (en especial Lucinda Dickey), sus actuaciones no ayudan precisamente a levantar en algo el conjunto final.

Con un mayor empaque en sus diferentes apartados podría haber resultado una destacada cinta de género. Con lo que ofrece, solo es recomendable para fanáticos del look ochentero.

Escena: el travelling que nos muestra a las diferentes mascotas tratando de almorzar, el gag más simpático y logrado de todos.

Lo mejor: Los últimos veinte minutos, donde sí nos hallamos ante una cinta del género slasher.

Lo peor: Las reacciones sin sentido de los protagonistas ante los acontecimientos, siendo el orondo co-protagonista el más absurdo en sus actuaciones.

Curiosidad: El director John Quinn terminó inclinando sus pasos profesionales hacía las cintas de corte erótico.

Valoración: 4/10

No hay comentarios:

Publicar un comentario