“Bebe de mi y vivirás eternamente”
FICHA TÉCNICA
Dirección-Neil Jordan
Guión-Anne Rice
Fotografía-Philippe Rousselot
Música-Elliot Goldhental
Producción-David Geffen/Stephen Woolley
INTERPRÉTES
Brad Pitt (Louies)
Tom Cruise (Lestat)
Kirsten Dunst (Claudia)
Antonio Banderas (Armand)
Christian Slater (Malloy)
Stephen Frears (Santiago)
SINOPSIS
Malloy es un periodista que se cita en un motel con una persona que tiene algo importante que relatarle. Su sorpresa es mayúscula cuándo la historia de su invitado comienza en 1791 y relata como se convirtió en vampiro.
Inevitable adaptación cinematográfica del best seller de Anne Rice, que ella misma se encargó de guionizar para ser dirigida por Neil Jordan, quien aporta al mito de los vampiros lo que en su día hizo con el de los Hombres Lobo con En compañía de lobos (1984).
Así, el director irlandés, presenta una cinta con un diseño de producción excepcional que recrea con absoluta precisión los diferentes lugares y épocas por los cuales discurre la historia. Le acompaña una fotografía que remarca la iluminación natural de velas y candiles para una acción que en su mayoría sucede de noche y una banda sonora igualmente notable que se mantiene como un casi imperceptible acompañamiento de las imágenes hasta que emerge con toda su fuerza en las secuencias más impactantes.
Sin embargo peca, como sucedió en su momento con la obra antes citada sobre Hombres Lobo, de cierta pomposidad y grandilocuencia que resta alma al conjunto final, ya que Jordan se preocupa más en la elegancia a la hora de rodar las escenas que de lo que se está contando, lo que da como resultado una especie de visión demasiado teatralizada de los acontecimientos.
La película, dado el alto coste de su inversión, se rodeo de un nutrido grupo de actores con suficiente caché como para atraeral público a las salas de cine por si solos. A pesar de ello, hay que destacar unas interpretaciones en su mayoría convincentes, con un Pitt correcto, un Cruise menos sobreactuado de lo habitual y un Banderas elegante y que aporta a su personaje todo su carisma latino. Sin embargo por encima de todos ellos sobresale la excepcional madurez interpretativa de una Kirsten Dunst, que con tan solo once años se enfrenta a un papel altamente complejo y del que sale no solamente airosa, sino como la mejor interpretación de la película.
Una obra que nos trae la versión más romántica del vampirismo a la par que muestra una cinta llena de sexualidad, violencia y madurez alejada de los cánones más ñoños de los últimos éxitos vampíricos para adolescentes.
Escena: La brutal venganza de Louies contra los vampiros franceses que han acabado con la vida de Claudia.
Lo mejor: El diseño de producción y una Kirsten Dunst sublime que roba a sus partenaires cada escena en la que comparten protagonismo.
Lo peor: Cierta pomposidad en las formas que hace perder a la cinta algo de alma en determinados momentos.
Curiosidad: Tom Cruise en un arranque de ego a los que ya nos tiene acostumbrados, hizo rodar las escenas que compartía con Pitt calzando alzas, para disminuir así los más de diez centímetros de altura de diferencia existentes entre el y el marido de Angelina Jolie.
Valoración: 8/10
Dirección-Neil Jordan
Guión-Anne Rice
Fotografía-Philippe Rousselot
Música-Elliot Goldhental
Producción-David Geffen/Stephen Woolley
INTERPRÉTES
Brad Pitt (Louies)
Tom Cruise (Lestat)
Kirsten Dunst (Claudia)
Antonio Banderas (Armand)
Christian Slater (Malloy)
Stephen Frears (Santiago)
SINOPSIS
Malloy es un periodista que se cita en un motel con una persona que tiene algo importante que relatarle. Su sorpresa es mayúscula cuándo la historia de su invitado comienza en 1791 y relata como se convirtió en vampiro.
Inevitable adaptación cinematográfica del best seller de Anne Rice, que ella misma se encargó de guionizar para ser dirigida por Neil Jordan, quien aporta al mito de los vampiros lo que en su día hizo con el de los Hombres Lobo con En compañía de lobos (1984).
Así, el director irlandés, presenta una cinta con un diseño de producción excepcional que recrea con absoluta precisión los diferentes lugares y épocas por los cuales discurre la historia. Le acompaña una fotografía que remarca la iluminación natural de velas y candiles para una acción que en su mayoría sucede de noche y una banda sonora igualmente notable que se mantiene como un casi imperceptible acompañamiento de las imágenes hasta que emerge con toda su fuerza en las secuencias más impactantes.
Sin embargo peca, como sucedió en su momento con la obra antes citada sobre Hombres Lobo, de cierta pomposidad y grandilocuencia que resta alma al conjunto final, ya que Jordan se preocupa más en la elegancia a la hora de rodar las escenas que de lo que se está contando, lo que da como resultado una especie de visión demasiado teatralizada de los acontecimientos.
La película, dado el alto coste de su inversión, se rodeo de un nutrido grupo de actores con suficiente caché como para atraeral público a las salas de cine por si solos. A pesar de ello, hay que destacar unas interpretaciones en su mayoría convincentes, con un Pitt correcto, un Cruise menos sobreactuado de lo habitual y un Banderas elegante y que aporta a su personaje todo su carisma latino. Sin embargo por encima de todos ellos sobresale la excepcional madurez interpretativa de una Kirsten Dunst, que con tan solo once años se enfrenta a un papel altamente complejo y del que sale no solamente airosa, sino como la mejor interpretación de la película.
Una obra que nos trae la versión más romántica del vampirismo a la par que muestra una cinta llena de sexualidad, violencia y madurez alejada de los cánones más ñoños de los últimos éxitos vampíricos para adolescentes.
Escena: La brutal venganza de Louies contra los vampiros franceses que han acabado con la vida de Claudia.
Lo mejor: El diseño de producción y una Kirsten Dunst sublime que roba a sus partenaires cada escena en la que comparten protagonismo.
Lo peor: Cierta pomposidad en las formas que hace perder a la cinta algo de alma en determinados momentos.
Curiosidad: Tom Cruise en un arranque de ego a los que ya nos tiene acostumbrados, hizo rodar las escenas que compartía con Pitt calzando alzas, para disminuir así los más de diez centímetros de altura de diferencia existentes entre el y el marido de Angelina Jolie.
Valoración: 8/10
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