FICHA TÉCNICA
Dirección -Michael Spierig/Peter Spierig
Guión -Michael Spierig/Peter Spierig
Fotografía -Andrew Strahorn
Música -Cliff Bradley
Producción -Michael Spierig/Peter Spierig
INTERPRÉTES
Felicity Mason (Rene Chaplin)
Mungo McKay (Marion)
Rob Jenkins (Wayne)
Lisa Cunningham (Sallyanne)
Dirk Hunter (Harrison)
Emma Randall (Molly)
SINOPSIS
Una lluvia de meteoritos atraviesa el cielo hasta impactar contra el tranquilo pueblecito de Berkeley, transformando a los lugareños en una horda de muertos vivientes.
Cinta australiana que comienza como una típica película de zombies para ir evolucionando hacía otros géneros del fantástico, especialmente el cine de invasiones alienígenas. Indudablemente los hermanos Spierig tienen dos referentes en el horizonte a la hora de abordar su debut, pudiéndose atisbar ideas y planteamientos tanto de Braindead como de Posesión infernal.
Siendo como es una producción de presupuesto ajustado, los resultados en lo referente a los efectos especiales, caracterizaciones y secuencias de acción son más que dignos, resaltando también la elección de una fotografia de tintes azulados que reflejan con acierto el aura de misterio que rodea los acontecimientos narrados. El principal problema de la cinta se halla en un guión confuso, con altibajos constantes y que hace que el espectador esté en un continuo conectar-desconectar de los acontecimientos.
Terrible partitura musical que acompaña todos y cada uno de los planos, y que chirría en relación a las imágenes mostradas, haciendo que en ocasiones secuencias pretendidamente de suspense estén presididas por una banda sonora de tintes cómicos.
Como viene siendo habitual en este tipo de historias, existe un reparto plural formado por personajes de caracteres diversos que son presentados previamente en un prólogo acertado que intercala rápidas secuencias para con dos pinceladas ir dibujando a los protagonistas.
Simpática pero fallida mezcla de géneros y que tiene su mayor virtud en el rendimiento que se saca de un presupuesto bajo y que luce en pantalla dignamente, siendo la forma de plasmar la historia su mayor lacra.
Escena: El vuelo de la avioneta en un cielo plagado de cuerpos.
Lo mejor: El irreverente y mal hablado personaje del agente Harrison.
Lo peor: Una música omnipresente, cargante y que perjudica el resultado final de muchas secuencias.
Curiosidad: Cada nuevo ataque de Marion a los zombies supone un homenaje al cine pirotécnco y coreografiado de John Woo, con especial fijación por extraer las armas de los sitios más insospechados.
Valoración: 5/10
Guión -Michael Spierig/Peter Spierig
Fotografía -Andrew Strahorn
Música -Cliff Bradley
Producción -Michael Spierig/Peter Spierig
INTERPRÉTES
Felicity Mason (Rene Chaplin)
Mungo McKay (Marion)
Rob Jenkins (Wayne)
Lisa Cunningham (Sallyanne)
Dirk Hunter (Harrison)
Emma Randall (Molly)
SINOPSIS
Una lluvia de meteoritos atraviesa el cielo hasta impactar contra el tranquilo pueblecito de Berkeley, transformando a los lugareños en una horda de muertos vivientes.
Cinta australiana que comienza como una típica película de zombies para ir evolucionando hacía otros géneros del fantástico, especialmente el cine de invasiones alienígenas. Indudablemente los hermanos Spierig tienen dos referentes en el horizonte a la hora de abordar su debut, pudiéndose atisbar ideas y planteamientos tanto de Braindead como de Posesión infernal.
Siendo como es una producción de presupuesto ajustado, los resultados en lo referente a los efectos especiales, caracterizaciones y secuencias de acción son más que dignos, resaltando también la elección de una fotografia de tintes azulados que reflejan con acierto el aura de misterio que rodea los acontecimientos narrados. El principal problema de la cinta se halla en un guión confuso, con altibajos constantes y que hace que el espectador esté en un continuo conectar-desconectar de los acontecimientos.
Terrible partitura musical que acompaña todos y cada uno de los planos, y que chirría en relación a las imágenes mostradas, haciendo que en ocasiones secuencias pretendidamente de suspense estén presididas por una banda sonora de tintes cómicos.
Como viene siendo habitual en este tipo de historias, existe un reparto plural formado por personajes de caracteres diversos que son presentados previamente en un prólogo acertado que intercala rápidas secuencias para con dos pinceladas ir dibujando a los protagonistas.
Simpática pero fallida mezcla de géneros y que tiene su mayor virtud en el rendimiento que se saca de un presupuesto bajo y que luce en pantalla dignamente, siendo la forma de plasmar la historia su mayor lacra.
Escena: El vuelo de la avioneta en un cielo plagado de cuerpos.
Lo mejor: El irreverente y mal hablado personaje del agente Harrison.
Lo peor: Una música omnipresente, cargante y que perjudica el resultado final de muchas secuencias.
Curiosidad: Cada nuevo ataque de Marion a los zombies supone un homenaje al cine pirotécnco y coreografiado de John Woo, con especial fijación por extraer las armas de los sitios más insospechados.
Valoración: 5/10
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