sábado, 23 de septiembre de 2017

EL PRINCIPE DE LAS TINIEBLAS (PRINCE OF DARKNESS, 1987) 97´


“Antes de que el hombre pisara la Tierra durmió durante siglos. Es maléfico, es real y está despertando.”

DE QUE VA: Un grupo de reputados estudiantes y científicos es citado en una vieja iglesia abandonada para participar en una investigación de la que no han recibido ningún tipo de información. Al llegar al lugar encuentran en los sótanos del edificio y entre decenas de crucifijos colgados un extraño recipiente que contiene una sustancia anómala en constante movimiento.


QUIEN LA HACE: La película está escrita y guionizada bajo seudónimo por el maestro John Carpenter, uno de los más grandes directores de terror contemporáneo y sinónimo de cine de culto. Junto al autor de La noche de Halloween o La cosa cabe la pena mencionar al productor Larry J. Franco, mano derecha de Carpenter en buenas parte de sus películas de los ochenta.


QUIEN SALE: Varios de los intérpretes de El príncipe de las tinieblas ya habían participado en otros trabajos de Carpenter, como sucede con Donald Pleasance (La noche de Halloween, 1997 Escape de Nueva York) o  Victor Wong y Dennis Dun (Golpe en la pequeña China). Curiosa la participación del cantante Alice Cooper como el líder de los vagabundos que asolan la iglesia.


QUE ME GUSTA: Carpenter vuelve a demostrar su talento a la hora de narrar el encierro involuntario de un grupo de personajes atrapados ante una situación que les supera, una de sus constantes. El maquillaje y la interpretación facial de una poseída Susan Blanchard. El uso de los insectos y gusanos como iconos de las fuerzas del mal. El sueño recurrente de los protagonistas.


QUE NO ME GUSTA: Unas explicaciones en exceso tecnificadas y que incluso juegan con el origen extraterrestre de la amenaza que acosa a los protagonistas, cuándo obviamente es más terrorífica una explicación religiosa. El abuso de la música de fondo del propio Carpenter llega en algún momento a saturar.

LA ESCENA: El momento en que Kelly se levanta de la cama poseída por el ente diabólico y plagada de llagas y demás heridas.





UNA CURIOSIDAD: John Carpenter solo contó con tres millones de dólares y un mes de rodaje para llevar adelante este título debido al fracaso en taquilla de Golpe en la pequeña China.








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