GENEROS DE TERROR

MI OTRO BLOG

lunes, 30 de diciembre de 2013

FREDDY KRUEGUER´S PESADILLA EN ELM STREET


TITULO
FREDDY KRUEGUER´S PESADILLA EN
ELM STREET
AUTORES
STEVE GERBER/RICH BUCKLER/TONY DEZUÑIGA/
ALFREDO ALCALA
AÑO
1992
EDITORIAL
PLANETA DE AGOSTINI/FORUM
COLECCIÓN
COMICS FORUM
PAGINAS
96

Aprovechando el estreno en 1991 de La muerte de Freddy se editó el presente tebeo que a través de una historia inédita recogía muchas de las ideas plasmadas en las diferentes películas estrenadas hasta entonces para presentar un interesante complemento a dichos títulos.

La novela gráfica se beneficia de una ilustración en blanco y negro de tonos adultos que recoge una historia algo caótica en su intento de abarcar demasiadas ideas y donde resulta tremendamente entretenido el localizar las viñetas inspiradas directamente en secuencias de las películas de la franquicia como la violación de Amanda Krueguer, las almas de sus víctimas en el torso de Freddy o la posibilidad de enfrentarte a este controlando tus propios sueños.

La historia central se complementa con varias ilustraciones de altura monopolizadas por el personaje de Freddy Krueguer y un breve artículo sobre la saga.

Toda una delicia para coleccionistas del psicokiller del jersey a rayas, gorro raido y guante de cuchillas.

PUNTOS FUERTES: Como el tebeo logra fundir la mayoría de ideas presentes en las películas de la saga.

PUNTOS DEBILES: En algún momento el guión de la novela gráfica adolece de cierto batiburrillo de ideas que cuesta interconectar.

RECOMENDADO PARA: Seguidores de la franquicia iniciada por Wes Craven en 1984 con Pesadilla en Elm street.

NEVER SLEEP AGAIN. THE ELM STREET LEGACY (Never sleep again. The Elm street legacy, 2010) 238´








“Don´t…fall…aslepp” 

FICHA TÉCNICA 

Dirección-Daniel Farrands/Andrew Kasch 
Guion-Thommy Hutson 
Fotografía-Buz Wallick 
Música-Sean Schafer Hennessy 
Producción-Daniel Farrands/ Thommy Hutson 

INTERPRÉTES 

Heather Langenkamp (Heather Langenhamp) 
Wes Craven (Wes Craven) 
Robert Shaye (Robert Shaye) 
Rachel Talalay (Rachel Talalay) 
Robert Englund (Robert Englund)

SINOPSIS 

El documental narra en orden cronológico y a través de sus responsables directos la gestación de una de las sagas de terror más importantes de la historia del cine. 

CRITICA 

Impresionante documental que a lo largo de sus cuatro horas hace un pormenorizado recorrido por la saga protagonizada por Freddy Krueguer desde su nacimiento en el año 1984 hasta la filmación del cruce de mitos del terror que fue Freddy Vs Jason (2003). 

Sus responsables han contando para dotar de objetividad y datos relevantes a su trabajo con los máximos responsables de la franquicia que van desgranando en pormenorizadas entrevistas perfectamente montadas y editadas para lograr una continuidad a la hora de analizar las películas en orden cronológico. Estas entrevistas, matriz de la película que nos ocupa, y en las cuales si bien hay alguna ausencia notable se cuenta con la practica mayoría de personas involucradas tanto a nivel técnico como interpretativo de la saga, se completan con abundante material fotográfico y audiovisual, en algún caso inédito, que logra enmarcar su abultada duración de un ritmo endiablado que hace sumamente interesante el visionado de la propuesta. 

Sus autores además y para terminar de dar empaque al producto lo han dotado de una imaginería visual que arranca con unos soberbios títulos de crédito y que muestran el cariño volcado en la realización de este ambicioso proyecto que se erige de esta manera como el gran complemento para los fans de la saga. 

Un documental obligado para todos los seguidores de Freddy Krueguer y la franquicia de la calle Elm. 

ESCENA PARA EL RECUERDO: Impacta ver secuencias como la de la cama escupiendo el cuerpo de Glen tras la impresionante secuencia de la cama expulsando litros de sangre en la cinta de 1984, escena que finalmente no fue editada y se descartó del montaje final. 

APLAUDIMOS: Como un documental de cuatro horas de duración puede llegar a antojarse corto gracias a una labor de documentación y entrevistas excelentes. 

DENUNCIAMOS: Evidentemente el público potencial de este trabajo es el que es y en ese sentido su distribución es limitada. 

UNA CURIOSIDAD: Daniel Farrands, uno de los responsables de la película y que ya había llevado a cabo un interesante documental sobre la saga Viernes 13 con His name was Jason (2009) se enfrentó tras el presente trabajo a una nueva revisión de esta franquicia protagonizada por Jason Voorhees con una obra de siete horas que promete ser espectacular. 

LA FRASE: “Es hora de irse a la cama y dormir” (Mujer) 

VALORACION: 9



PESADILLA EN ELM STREET. EL ORIGEN (A nightmare on Elm street, 2010) 95´








“He knows where you sleep” 

FICHA TÉCNICA 

Dirección-Samuel Bayer 
Guion-Wesley Strick/Eric Heisserer 
Fotografía-Jeff Cutter 
Música-Steve Jablonsky 
Producción-Michael Bay/Andrew Form 

INTERPRÉTES 

Jackie Earle Haley (Freddy Krueguer) 
Rooney Mara (Nancy Holbrook) 
Kyle Gallner (Quentin Smith) 
Katie Cassidy (Kris Fowles) 
Thomas Dekker (Jesse Braun) 
Kellan Lutz (Dean Russell) 
Clancy Brown (Alan Smith) 
Connie Britton (Gwen Holbrook) 

SINOPSIS 

Dean lleva días sin descansar. Unas horribles pesadillas en las que un hombre con el rostro quemado y cuchillas en su mano le persigue para matarlo le hacen afrontar el sueño con pánico a no despertar jamás. Cuándo está contando su situación a su amiga Kris y mientras esta se ausenta para ir al lavabo, el joven agarra un cuchillo y se rebana el cuello. Todos piensan que se trata de un suicidio, sin embargo y aunque no logro ver a nadie más en el momento de la muerte, Kris está convencida que alguien mató a Dean. 

CRITICA 

Remake del título de culto rodado por Wes Craven en 1984 que toma a esta cinta como referente obviando el resto de títulos de la saga. La película está dirigida por Samuel Bayer, cuya experiencia en el terreno de los videos musicales hacen que logre dotar a la película de una acertada estética y una resolución técnica más que aceptable. Sin embargo la idea naufraga en su propia evolución, ya que partiendo de un interesante arranque, su calidad va diluyéndose conforme avanzan los actos hasta una media hora final francamente aburrida. 

Bayer apuesta por retomar el terror puro como leit motive de la cinta y si bien su Freddy mantiene su ironía y sarcasmo característicos, estos se engloban dentro de una figura terrorífica. La elección de Earle Haley para sustituir a Robert Englund como asesino de las pesadillas es acertada, aportando el actor una imagen de Krueguer entre lastimera y terrible. Otra cosa es la forma en que se ha resuelto el maquillaje del protagonista, cuyas prótesis imposibilitan prácticamente actuar al actor bajo la máscara. 

Como ya se apuntaba con anterioridad la película va cayendo en picado en interés conforme avanza la historia. Los primeros minutos protagonizados por el personaje de Kris son los más interesantes y donde se concentran las mejores secuencias de terror, es una vez que Nancy y Quentin monopolizan la historia cuándo la película cae en picado. Y es que la labor anodina y totalmente desganada de los dos jóvenes actores lastra fatalmente la historia hasta llevar al espectador al mayor de los aburrimientos. La resolución torpe y demasiado simplona de la historia no ayuda a reflotar una propuesta que no había empezado nada mal y que acaba por resultar desilusionante. 

En la película vuelven a confluir varios de los elementos manejados por Craven en la concepción que hizo de la historia, como es el papel de los padres de los protagonistas, peor manejado en este caso o la utilización del folclore como elemento inspirador de un Freddy Krueguer como un émulo del hombre del saco, bien comparado con el cuento de El flautista de Hamelin. Igualmente este remake recupera varias de las secuencias más recordadas de la película rodada casi treinta años atrás y que a pesar del avance en el campo de los efectos especiales no logran superar en espectacularidad a las manualidades llevadas a cabo por Craven y su equipo. 

Una nueva versión acorde al gusto de las nuevas generaciones pero que no logra acercarse ni por asomo a la excelencia lograda por Craven con la Pesadilla en Elm street original. 

ESCENA PARA EL RECUERDO: La muerte de Kris, no solo su resolución emulando la de Tina en la cinta de 1984, sino toda la secuencia desde el momento en que queda dormida y parece que despierta a pesar de seguir en su sueño. 

APLAUDIMOS: Las buenas maneras de Jackie Earle Haley como Freddy Krueguer y la apuesta sin ambages por su pasado pedófilo en la trama. 

DENUNCIAMOS: Las interpretaciones de Rooney Mara y Kylle Gallner que no solo son aburridas y desganadas, sino que por inercia acaban por hacer naufragar la película especialmente en su largo tramo final. 

UNA CURIOSIDAD: Posiblemente no buscado, pero la historia de un Freddy Krueguer jardinero y responsable del mantenimiento de la escuela de Springwood como origen de la historia tiene numerosos paralelismos con el capítulo de Los Simpons de La casa árbol del terror en el que se parodiaba la cinta de Craven y donde era Willie, el encargado de mantenimiento del colegio de Bart y Lisa, quien hiciera el papel de Krueguer. 

LA FRASE: “Si mueres en tus sueños mueres de verdad” (Jesse Braun) 

VALORACION: 6          




FREDDY VS JASON (Freddy Vs Jason, 2003) 93´








“Tu peor pesadilla” 

FICHA TÉCNICA 

Dirección-Ronny Yu 
Guion-Damian Shannon/Mark Swift 
Fotografía-Fred Murphy 
Música-Graeme Revell 
Producción-Sean S. Cunningham 

INTERPRÉTES 

Monica Keena (Lori Campbell) 
Jason Ritter (Will Rollins) 
Kelly Rowland (Kia Waterson) 
Chris Marquette (Charlie Linderman) 
Brendan Fletcher (Mark Davis) 
Katharine Isabelle (Gibb)
Ken Kirzinger (Jason Voorhees) 
Robert Englund (Freddy Krueguer) 

SINOPSIS 

Totalmente debilitado tras ser olvidado por los jóvenes de Springwood, Freddy Krueguer recurre a Jason Voorhees para que mate por él y de esa manera haga renacer el recuerdo en la población de su figura, dándole de esa manera el poder para regresar. Sin embargo cuándo Jason no está dispuesto a dejar de matar una vez Freddy recobra todo su poder, se hace inevitable un enfrentamiento entre ambos para dilucidar quién puede seguir matando y quién no. 

CRITICA 

El enfrentamiento cinematográfico entre Jason y Freddy era una idea largamente acariciada por los responsables de ambas sagas. Finalmente pudo llevarse a cabo encargando tan arriesgado proyecto al director Ronny Yu quien ya había demostrado ser capaz de llevar a buen a puerto la propuesta a raíz del éxito de La novia de Chucky (1998). 

La historia si bien es lo de menos en una película de este tipo se preocupa de contentar a los fans de ambas sagas mostrando desnudos, gore, pesadillas, machetazos y todos los referentes tanto de la franquicia sobre Freddy como la de Jason. El director, consciente del material con el que cuenta, no se lo toma en serio y coge todos esos tópicos para ofrecer un espectáculo anclado en el humor negro que hará las delicias de los aficionados pero que dejará totalmente fríos a los no iniciados en este tipo de películas. 

Visualmente la película es impecable, jugando Yu con las tonalidades y cromatismos en una película técnicamente impecable y que aprovecha los avances en el terreno de los efectos especiales para ofrecer un título abiertamente gore, siendo en ese sentido los sangrientos títulos de crédito que abren la película toda una declaración de intenciones por parte de sus responsables. 

La cinta arma una historia interesante aunque sin demasiada originalidad para justificar una mínima base argumental que lleve a la media hora final en la cual tiene lugar el esperado enfrentamiento entre los tótems del terror de los ochenta, donde la película nos obsequia con un enfrentamiento de altura muy bien resuelto tanto a nivel técnico como argumental con Jason abatido con su propio machete y Freddy atravesado con sus cuchillas y donde finalmente no hay vencedores ni vencidos dejando de esa manera a los fans de ambos asesinos con un buen sabor de boca. 

Todo un disfrute para los seguidores de Jason y Freddy cuya pega principal se encuentra en que hay que tener unos conocimientos previos de ambas sagas para captar todo el aire de homenaje que encierra la propuesta. 

Para no tomar en serio y dejarse llevar por la propuesta de la película. 

ESCENA PARA EL RECUERDO: La aparición de Jason envuelto en llamas en la fiesta del maizal provocando una carnicería entre los jóvenes asistentes. 

APLAUDIMOS: Ronny Yu logra una conjunción perfecta entre ambas sagas, siendo disfrutable por los aficionados de las dos y sin que nadie se sienta menospreciado por la propuesta y resolución. 

DENUNCIAMOS: Aunque asumible en este tipo de películas las reacciones de los protagonistas son ilógicas al cien por cien, desde irse a su casa a descansar tras ser testigos de una matanza en la fiesta en el maizal como planear llevarse a Jason cuándo este cae inconsciente. 

UNA CURIOSIDAD: Jason Ritter quien interpreta a Will en la película es hijo del desaparecido actor John Ritter, quien trabajara con Ronny Yu en La novia de Chucky (1998)y que fallecería el mismo año de estreno de Freddy Vs Jason. 

LA FRASE: “Bienvenido a mi pesadilla” (Freddy Krueguer) 

VALORACION: 8



LA NUEVA PESADILLA DE WES CRAVEN (Wes Craven´s new nightmare, 1994) 107´








"Esta vez el terror no se detiene en la pantalla”

FICHA TÉCNICA 

Dirección-Wes Craven 
Guion-Wes Craven 
Fotografía-Mark Irwin 
Música-J. Peter Robinson 
Producción-Marianne Maddalena 

INTERPRÉTES 

Heather Langenkamp (Heather Langenkamp)
Miko Hughes (Dylan) 
Tracy Middendorf (Julie) 
Robert Englund (Robert Englund/Fred Krueguer) 
David Newsom (Chase Porter) 
Fran Bennett (Dra. Heffner) 
John Saxon (John Saxon) 
Wes Craven (Wes Craven) 

SINOPSIS 

Han pasado diez años desde que tuviera lugar el estreno de Pesadilla en Elm street y buena parte del equipo original de la cinta vuelve a reunirse ante la idea de una nueva entrega dirigida por Wes Craven. Heather, la protagonista que diera vida a Nancy, comienza a sospechar que el guion que Craven está escribiendo comienza a cobrar vida afectando especialmente a su hijo Dylan. Cuándo su marido muere en un accidente de coche al quedarse dormido al volante sus temores cobran visos de terrible realidad. 

CRITICA 

Tras el fiasco de la entrega dirigida por Rachel Talalay, Wes Craven, creador de la historia original y del personaje de Freddy Krueguer, decidió recomponer la saga sacándose de la manga una historia que nos habla de la idea de que el propio Krueguer sea real. Y lo hace a través de un interesante juego de metacine donde los actores se interpretan a sí mismos, planteándose una original visión del propio mundo de la saga cinematográfica que va diluyéndose conforme avanza la trama y la paranoia va envolviendo todo el conjunto. 

Heather Langenkamp vuelve a monopolizar el protagonismo de la película tal como ya hiciera en la entrega inicial apoyada esta vez en el personaje de Dylan, su hijo, interpretado por el niño Miko Hughes, quien ya había demostrado podía dar muy mal rollo en la inquietante El cementerio viviente (1989). No lo hacen mal y eso a pesar del problema de dar tanto peso en una historia tan oscura a un niño de apenas ocho años. Junto a estos intérpretes podemos disfrutar de multitud de cameos de actores y demás profesionales vinculados a la saga, incluso del propio Craven. 

La cinta está plagada de guiños a la primera entrega paralelos a una caterva de planteamientos por parte de Craven en torno al miedo y demás flocklore además de otras ideas ya sugeridas en la película de 1984. Pero a la hora de plasmar el libreto sobre fotogramas la complejidad de este no queda bien definido resultando un batiburrillo que por el camino pierde su principal esencia, la recuperación de Freddy como icono terrorífico. 

En ese sentido se apuesta por modificar la propia presencia del personaje tanto en su maquillaje como en el estilismo, propuesta cuándo menos discutible en lo referente a la garra orgánica y una vestimenta donde destacan por erróneos los pantalones y gabán de cuero o las botas. Frente a su nuevo look podemos agradecer los intentos de Craven por volver a ubicar a Freddy en el lado de hombre del saco frente a la pantomima en la que se había convertido, intentos que quedan lastrados por un final con una resolución demasiado ramplona y sencilla. 

Resumiendo, La nueva pesadilla de Wes Craven es más interesante como ejercicio de cine dentro de cine que como intento de reflotar la franquicia, en cuyo caso se queda a medio gas a pesar de los esfuerzos por parte de todos los implicados en ofrecer un producto digno. 

Craven vuelve sobre el personaje que le consagró para constatar el agotamiento de la fórmula. 

ESCENA PARA EL RECUERDO: La muerte de Julie, última de la cinta y por lo tanto de la saga y que emula el asesinato de Tina, la primera muerte a manos de Freddy, elemento que cierra un círculo iniciado diez años atrás. 

APLAUDIMOS: La propuesta de Craven de uso del metacine es notablemente interesante dejando muchos momentos francamente interesantes al ver a los responsables de la cinta interpretándose a si mismos. 

DENUNCIAMOS: El nuevo Freddy queda bastante desdibujado al no dedicarse el suficiente tiempo en pantalla a trabajarlo. 

UNA CURIOSIDAD: Heather Langenkamp fue realmente acosada por un fan, lo que hizo que Craven pidiera permiso a la actriz antes de insertar ese elemento en el guión.

LA FRASE: “Y ahora todos vosotros sois mis hijos” (Robert Englund) 

VALORACION: 6,75