“The fairytale is over”
FICHA TÉCNICA
Dirección-Rupert Sanders
Guión-Evan Daugherty/John Lee Hancock/Hossein Amini
Fotografía-Greig Fraser
Música-James Newton Howard
Producción-Sam Mercer/Palak Patel/Joe Roth
INTERPRÉTES
Kristen Stewart (Blancanieves)
Chris Hemsworth (Leñador)
Charlize Theron (Reina Ravenna)
Sam Claflin (William)
Ian McShane (Beith)
Bob Hoskins (Muir)
Ray Winstone (Gort)
Nick Frost (Nion)
SINOPSIS
Blancanieves, una joven de extrema belleza y bondad, es la única heredera al trono de su padre, un rey sumergido en una profunda tristeza desde la muerte de su amada y madre de la niña. Este, tras una ofensiva contra un ejército de seres fantasmales, libera a una joven de enorme belleza, de la cual se enamora perdidamente. No tardan en contraer matrimonio, pero la misma noche de bodas, la novia mata al rey, abre las puertas del castillo a un ejército invasor y se hace con la corona, instaurando un reinado de terror y desolación.
CRITICA
Descafeinada adaptación dirigida por el novel Rupert Sanders (cuyos trabajos se habían desarrollado en el ámbito de los videojuegos como director de secuencias de acción) y que se inclina por una trama oscura y sombría, alejada de versiones anteriores más edulcoradas del famoso relato de los hermanos Grimm.
El guion está repleto de secuencias ya vistas con anterioridad, diálogos manidos e ideas plasmadas en títulos como Willow, El señor de los anillos, Juego de Tronos u otras cintas sobre el llamado subgénero de Espada y Brujería. El mayor de sus peros no es sin embargo esta suma de ideas anteriores, sino que plasmadas en las dos horas de metraje generan varias caídas de ritmo (especialmente marcada cuándo Theron desaparece de escena para dejar el protagonismo al tándem Stewart- Hemsworth). Además, las representaciones de batallas (donde el director podría haber dado el do de pecho dado su experiencia en este tipo de secuencias) tampoco son nada del otro mundo, siendo superadas por títulos como Braveheart (no es necesario ir a la superlativa El señor de los anillos).
El portentoso poderío del diseño de producción nos deja escenarios de una gran belleza, un vestuario preciosista (en especial en los trajes de la villana de la función) y una ambientación notable, pero todo este fuego de artificio desmerece por el mal uso que se hace no solo de la historia, sino del a priori imponente casting.
Y es que la elección de Kirsten Stewart como Blancanieves supone un error de nota, por carecer del carisma y presencia necesarios para dar vida a la heroína del cuento, máxime teniendo en cuenta el papelón de Charlize Theron, única excusa válida para visionar la primera entrega de una posible trilogía (ya está en marcha la secuela). Junto al duo de actrices, un Hemsworth en su sempiterno rol de héroe y unos desaprovechados buenos actores en los roles de enanos (Frost o Hoskins por ejemplo) ya que su aparición es prácticamente anecdótica, frente a la acaparación de planos por parte de Blancanieves y el citado cazador.
Una buena idea desaprovechada posiblemente por la mala elección tanto del director (que alguien que no ha trabajado con anterioridad en el terreno cinematográfico maneje más de ciento sesenta millones de euros de presupuesto puede ser peligroso, y aún han de agradecer que la cinta está contando con el favor del público) como por el de la protagonista de la saga Crepúsculo en el rol principal de Blancanieves.
Escena: El baño que la Reina Ravenna se da en leche, de una gran belleza plástica y que nos deleita con la hermosura de lo mejor de la cinta, Charlize Theron.
Puntos Fuertes: Charlize Theron, estupenda como villana y que monopoliza todas las secuencias en las que aparece hasta el punto de desear el espectador su victoria frente a una sosias Blancanieves.
Puntos Débiles: Kirsten Stewart, cuya inexpresividad y falta de atractivo la hace la menos indicada para el rol de Blancanieves.
Curiosidad: La promesa de Ravenna para hacer que el cazador vaya en busca de Blancanieves para matarla es la misma que hace Taramis a Conan en la segunda entrega cinematográfica sobre el héroe Cimmerio, devolver a la vida a su amada.
La Frase: “Espejo, espejo mágico, dime una cosa, que mujer en este Reino es la más hermosa” (Reina Ravenna)
Valoración: 5,25 (Lujoso envoltorio para un pobre contenido)
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