“Zombies are people too”
FICHA TÉCNICA
Dirección-Matthew Kohnen
Guión-Matthew Kohnen/Sean Kohnen
Fotografía-Allan Fiterman
Música-The Newton Brothers
Producción-Sean Kohnen
INTERPRÉTES
Matthew Davis (Mike)
Julianna Robinson (Vanessa)
Michael Grant Terry (Tim)
Betsy Beutler (Cindy)
Colby French (Nick Steele)
Richard Riehle (Coronel South)
Jack Orend (Dr Richter)
SINOPSIS
Un camión militar que transporta una extraña sustancia que forma parte de un fallido experimento para crear una raza de super soldados sufre un accidente contaminando una caja de ingrediente para helado que a su vez provoca que un grupo de jóvenes se transformen en zombies. Pero estos zombies no son conscientes de su nuevo estado y creen que es el resto de la población quien ha sufrido algún tipo de mutación.
Con un original punto de partida que subjetiviza la visión que tienen los zombies de su nuevo estado (y que el director inteligentemente remarca con la utilización del blanco y negro o color), se nos presenta esta simpática comedia de terror que trata de generar novedades en este subgénero.
Es cierto que no llega a las cotas de virtuosismo de Zombies party (2004) pero no hay que negarle simpatías a una comedia de terror que logra la complicidad del espectador gracias a la frescura de sus protagonistas, un desarrollo ágil y sin apenas tropiezos (más allá que le cuesta coger el ritmo adecuado) y con escenas y secuencias que harán brotar la sonrisa desde otro lado de la pantalla.
Presupuesto escaso que se nota en pantalla y que el director, conocedor de sus limitaciones, compensa cediendo la impronta de la cinta al humor surrealista y en ocasiones dramático. Por ese motivo se perdonan los limitados efectos visuales y la casi inexistencia de figurantes en la ciudad en la que se desarrollan los acontecimientos.
Un reparto compuesto por rostros televisivos que ganan nuestra simpatía desde la primera secuencia y una partitura musical llena de temas frescos y pegadizos terminan por dar un empaque más que correcto al debut como director de Matthew Kohnen.
Una cinta que tras un evidente trasfondo humorístico esconde alguna escena donde el humor deja paso al patetismo y la tristeza.
Escena: La visita de Tim y Cindy a casa de esta última y donde un zombificado Tim pedirá permiso a unos padres atrincherados para salir con su hija.
Lo mejor: La estupenda idea de poder tener una doble visión de los acontecimientos, la real y la vivida por los zombies protagonistas.
Lo peor: Su abrupto final.
Curiosidad: Existe una película del mismo año y que bajo el mismo título (aunque en realidad el título original de ambas es diferente, el problema estriba en la traducción que se ha hecho en España de la presente película) también abarca el género zombie e igualmente lo plasma desde una visión de comedia de terror.
Valoración: 7/10
Dirección-Matthew Kohnen
Guión-Matthew Kohnen/Sean Kohnen
Fotografía-Allan Fiterman
Música-The Newton Brothers
Producción-Sean Kohnen
INTERPRÉTES
Matthew Davis (Mike)
Julianna Robinson (Vanessa)
Michael Grant Terry (Tim)
Betsy Beutler (Cindy)
Colby French (Nick Steele)
Richard Riehle (Coronel South)
Jack Orend (Dr Richter)
SINOPSIS
Un camión militar que transporta una extraña sustancia que forma parte de un fallido experimento para crear una raza de super soldados sufre un accidente contaminando una caja de ingrediente para helado que a su vez provoca que un grupo de jóvenes se transformen en zombies. Pero estos zombies no son conscientes de su nuevo estado y creen que es el resto de la población quien ha sufrido algún tipo de mutación.
Con un original punto de partida que subjetiviza la visión que tienen los zombies de su nuevo estado (y que el director inteligentemente remarca con la utilización del blanco y negro o color), se nos presenta esta simpática comedia de terror que trata de generar novedades en este subgénero.
Es cierto que no llega a las cotas de virtuosismo de Zombies party (2004) pero no hay que negarle simpatías a una comedia de terror que logra la complicidad del espectador gracias a la frescura de sus protagonistas, un desarrollo ágil y sin apenas tropiezos (más allá que le cuesta coger el ritmo adecuado) y con escenas y secuencias que harán brotar la sonrisa desde otro lado de la pantalla.
Presupuesto escaso que se nota en pantalla y que el director, conocedor de sus limitaciones, compensa cediendo la impronta de la cinta al humor surrealista y en ocasiones dramático. Por ese motivo se perdonan los limitados efectos visuales y la casi inexistencia de figurantes en la ciudad en la que se desarrollan los acontecimientos.
Un reparto compuesto por rostros televisivos que ganan nuestra simpatía desde la primera secuencia y una partitura musical llena de temas frescos y pegadizos terminan por dar un empaque más que correcto al debut como director de Matthew Kohnen.
Una cinta que tras un evidente trasfondo humorístico esconde alguna escena donde el humor deja paso al patetismo y la tristeza.
Escena: La visita de Tim y Cindy a casa de esta última y donde un zombificado Tim pedirá permiso a unos padres atrincherados para salir con su hija.
Lo mejor: La estupenda idea de poder tener una doble visión de los acontecimientos, la real y la vivida por los zombies protagonistas.
Lo peor: Su abrupto final.
Curiosidad: Existe una película del mismo año y que bajo el mismo título (aunque en realidad el título original de ambas es diferente, el problema estriba en la traducción que se ha hecho en España de la presente película) también abarca el género zombie e igualmente lo plasma desde una visión de comedia de terror.
Valoración: 7/10
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