“Every place has something to hide”
FICHA TÉCNICA
Dirección Olaf Ittenbach
Guión Thomas Reitmair/Olaf Ittenbach
Fotografía Holder Fleig
Música Michael Ehninger
Producción Hans-Arnd Jovi
INTERPRÉTES
Christopher Kriesa Douglas Madsen
Martina Ittenbach Alice
Simon Newby Arthur Palmer
Jaymes Butler Stephen Nix
Dan Van Husen Paul Anderson
Wolfgang Müller George
SINOPSIS
Un autobús que transporta a varios presos a la penitenciaria sufre un aparatoso accidente con otro automóvil gracias al cual varios de los reos logran huir llevándose consigo al conductor del coche. En su escapada a través del bosque llegan a una solitaria cabaña en medio de un páramo, morada habitada por un grupo de extravagantes personas.
El prolífico Olaf Ittenbach ofrece una película que presenta todas y cada una de las virtudes y defectos del realizador alemán, lo que ha provocado presente una filmografía irregular, donde alternan entretenidas obras del género gore con títulos más aburridos y con cierta carga de pedantería.
En esta ocasión nos encontramos en el siguiente supuesto, ya que la cinta presenta una excusa argumental demasiado banal para sujetar más de cien minutos de metraje, minutos que el director llena de escenas alargadas, recursos narrativos bien rodados pero innecesarios (flashbacks, montajes paralelos) y diálogos donde el mismo Ittenbach y Thomas Reitmar, coautores del guión, dan rienda suelta a su prosa.
El resultado, una película estirada, aburrida y que habría quedado como un interesante mediometraje, pero que no da para un largo.
Como defensa de su director, podemos destacar la evolución desde sus inicios en el conocimiento de las técnicas cinematográficas, algo que plasma en el presente caso, además de manejar con soltura presupuestos ajustados. Además, como creador de efectos sanguinolentos es ciertamente imaginativo y eficaz.
Lastima que como director de actores no sea igualmente eficaz, logrando interpretaciones muy pobres y forzadas, y desaprovechando además al actor Jürgen Prochnow (el nombre más conocido de su reparto), limitando su intervención a un innecesario cameo.
Una pobre muestra del personal cine de Olaf Ittenbach, por otro lado el mejor exponente del conocido ultra gore alemán.
Escena: La lucha del primer grupo de reos con los demonios, una muestra del buen hacer de Ittenbach en el terreno del gore, aunque más comedido que en otros títulos.
Lo mejor: El buen hacer del director alemán en el terreno de los efectos especiales.
Lo peor: Repetir la misma trama en el segundo acto, lo que hace que sepamos de inicio a fin lo que va a suceder.
Curiosidad: El personaje de Alice está interpretado por la mujer de Ittenbach, Martina, colaboradora habitual en la filmografía de su marido.
Valoración: 3/10
Guión Thomas Reitmair/Olaf Ittenbach
Fotografía Holder Fleig
Música Michael Ehninger
Producción Hans-Arnd Jovi
INTERPRÉTES
Christopher Kriesa Douglas Madsen
Martina Ittenbach Alice
Simon Newby Arthur Palmer
Jaymes Butler Stephen Nix
Dan Van Husen Paul Anderson
Wolfgang Müller George
SINOPSIS
Un autobús que transporta a varios presos a la penitenciaria sufre un aparatoso accidente con otro automóvil gracias al cual varios de los reos logran huir llevándose consigo al conductor del coche. En su escapada a través del bosque llegan a una solitaria cabaña en medio de un páramo, morada habitada por un grupo de extravagantes personas.
El prolífico Olaf Ittenbach ofrece una película que presenta todas y cada una de las virtudes y defectos del realizador alemán, lo que ha provocado presente una filmografía irregular, donde alternan entretenidas obras del género gore con títulos más aburridos y con cierta carga de pedantería.
En esta ocasión nos encontramos en el siguiente supuesto, ya que la cinta presenta una excusa argumental demasiado banal para sujetar más de cien minutos de metraje, minutos que el director llena de escenas alargadas, recursos narrativos bien rodados pero innecesarios (flashbacks, montajes paralelos) y diálogos donde el mismo Ittenbach y Thomas Reitmar, coautores del guión, dan rienda suelta a su prosa.
El resultado, una película estirada, aburrida y que habría quedado como un interesante mediometraje, pero que no da para un largo.
Como defensa de su director, podemos destacar la evolución desde sus inicios en el conocimiento de las técnicas cinematográficas, algo que plasma en el presente caso, además de manejar con soltura presupuestos ajustados. Además, como creador de efectos sanguinolentos es ciertamente imaginativo y eficaz.
Lastima que como director de actores no sea igualmente eficaz, logrando interpretaciones muy pobres y forzadas, y desaprovechando además al actor Jürgen Prochnow (el nombre más conocido de su reparto), limitando su intervención a un innecesario cameo.
Una pobre muestra del personal cine de Olaf Ittenbach, por otro lado el mejor exponente del conocido ultra gore alemán.
Escena: La lucha del primer grupo de reos con los demonios, una muestra del buen hacer de Ittenbach en el terreno del gore, aunque más comedido que en otros títulos.
Lo mejor: El buen hacer del director alemán en el terreno de los efectos especiales.
Lo peor: Repetir la misma trama en el segundo acto, lo que hace que sepamos de inicio a fin lo que va a suceder.
Curiosidad: El personaje de Alice está interpretado por la mujer de Ittenbach, Martina, colaboradora habitual en la filmografía de su marido.
Valoración: 3/10
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