V de vampiro (The V world, 2006) 56´
Dirección -Ernest R. Dickerson
Guión -Mick Garris
Fotografía -Jon Joffin
Música -Lomax
Producción -Ben Browning/Adam Goldworm/Pascal Verschooris
Arjay Smith
Branden Nadon
Michael Ironside
Una muestra más del cine sobre vampiros, que utiliza una historia con interesantes factores pero que no cuajan por la falta de empaque del guión. Así, nos encontramos con un vampiro mezcla de clásicos tópicos (animadversión hacía el ajo, alergia a la luz del sol…) con elementos menos formales, como el hecho de carecer de los típicos incisivos desarrollados (lo que favorece unas espectaculares secciones de yugular) o el aspecto tan poco glamuroso que ofrecen frente al de vampiros más literarios.
La historia se inicia con un prometedor, aunque algo estirado, prólogo que finaliza con el ataque del vampiro. A partir de entonces, hay un decaimiento de la propuesta con escenas que llegan a cotas absurdas (la llamada a la policía o la cena a base de pizza). Solo en su tramo final se recupera el pulso inicial y las secuencias más gore.
Parco trabajo de los actores, donde no se salva ni el habitualmente solvente Michael Ironside, quien sobreactúa de tal manera que por momentos nos recuerda al Jack Nicholson más pasado de vueltas.
Buena base pero escasa para ocupar sesenta minutos de metraje.
Escena: La decapitación del vampiro.
Valoración: 5/10
Dirección -Ernest R. Dickerson
Guión -Mick Garris
Fotografía -Jon Joffin
Música -Lomax
Producción -Ben Browning/Adam Goldworm/Pascal Verschooris
Arjay Smith
Branden Nadon
Michael Ironside
Una muestra más del cine sobre vampiros, que utiliza una historia con interesantes factores pero que no cuajan por la falta de empaque del guión. Así, nos encontramos con un vampiro mezcla de clásicos tópicos (animadversión hacía el ajo, alergia a la luz del sol…) con elementos menos formales, como el hecho de carecer de los típicos incisivos desarrollados (lo que favorece unas espectaculares secciones de yugular) o el aspecto tan poco glamuroso que ofrecen frente al de vampiros más literarios.
La historia se inicia con un prometedor, aunque algo estirado, prólogo que finaliza con el ataque del vampiro. A partir de entonces, hay un decaimiento de la propuesta con escenas que llegan a cotas absurdas (la llamada a la policía o la cena a base de pizza). Solo en su tramo final se recupera el pulso inicial y las secuencias más gore.
Parco trabajo de los actores, donde no se salva ni el habitualmente solvente Michael Ironside, quien sobreactúa de tal manera que por momentos nos recuerda al Jack Nicholson más pasado de vueltas.
Buena base pero escasa para ocupar sesenta minutos de metraje.
Escena: La decapitación del vampiro.
Valoración: 5/10
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