GENEROS DE TERROR

MI OTRO BLOG

viernes, 29 de julio de 2011

BONE SICKNESS (Bone sickness, 2004) 102´





“Splaterrific”

FICHA TÉCNICA

Dirección-Brian Paulin
Guión-Brian Paulin
Fotografía-Brian Paulin
Música-Brian Paulin
Producción-Brian Paulin/Rich George

INTERPRÉTES

Brian Paulin (Thomas Granger)
Darya Zabinski (Kristen McNetti)
Ruby Larocca (Andrea Granger)
Rich George (Alex McNetti)
Kevin Barbare (Inspector Seacrest)
Ernest Hutcherson (Inspector Jefe)


SINOPSIS

Alex sufre una extrañísima enfermedad degenerativa ante la que parece no hay nada que hacer salvo esperar la muerte. Kristen, su esposa, desesperada ante la situación, recurre a su amigo Thomas, trabajador en la morgue y quien prueba en el paciente una técnica experimental por el creada mediante la cual alimenta a Alex con tuétano de personas fallecidas. Pero los resultados no serán los esperados.

Imaginativa y entretenida sorpresa, el presente título es una película creada por aficionados para aficionados. Es por ello que hay que olvidar ciertos elementos técnicos negativos, como una fotografía totalmente amateur o un look cercano al video doméstico para centrarse en la voluntad de sus máximos responsables, Brian Paulin y Rich George en facturar un producto con cierta dignidad dentro de unas limitaciones presupuestarias totales.

A pesar de dichas cotas a la hora de plasmar en imágenes un guión excesivamente complejo y presuntuoso (la cinta finaliza con una escena de guerra abierta entre los zombies y los humanos que deja patente la falta de liquidez en la producción), el resultado final es digno en cuánto a efectos se refiere, pero también maquillajes (a pesar del terrible error de no maquillar siquiera las manos de los extras que hacen el papel de zombies en los primeros planos) donde Paulin presenta cierta originalidad a la hora de plasmar sus criaturas frente a los cánones prototípicos establecidos a raíz de la saga de Romero (sus zombies son cadáveres descompuestos, esqueletos vivientes).

Como no puede ser de otra manera lo mejor de la función se encuentra en los tres últimos cuartos de hora, todo un recital gore donde los creadores plasman sus conocimientos en materia de efectos. Para justificar este tramo final, por otra parte, hemos de pasar por una hora de cinta que tiene la virtud de al menos no hacerse aburrida, consiguiendo mantener un tempo narrativo adecuado, y eso a pesar de las desastrosas interpretaciones de las que hacen gala todos y cada uno de los participantes (y entre los que se encuentran Paulin y George, padres de la criatura).

A la hora de enfrentarse a un título como Bone sickness puede hacerse desde una doble vertiente. Sacando a la luz todos y cada uno de los errores (que los hay) a nivel técnico, de maquillaje, guión e interpretativo, o valorar el resultado final, una cinta entretenida, realizada con un formato totalmente amateur y que resulta más simpática que muchas superproducciones francamente más aburridas.

Escena: Thomas se hace con un cadáver fresco de una muchacha a la que secciona con una radial ante la horrorizada mirada de Kristen.

Lo mejor: Se nota que se han echado ganas a pesar de todas las limitaciones presupuestarias y de rodaje a las que Paulin y su equipo se hayan enfrentado, algo que se refleja en el resultado final.

Lo peor: La historia es demasiado enrevesada para el fin último de la película, que es mostrar todo el recital gore que ilustra los cuarenta últimos minutos.

Curiosidad: Los zombies de Paulin recuerdan (de manera inconsciente) a los templarios de Armando Osorio por lo descompuesto de sus rostros y las telarañas cubriendo sus cuerpos.

Valoración: 6/10

BLOOD SISTERS (Blood sisters, 1986) 82´





“Their hazing was a nigth to dismember”

FICHA TÉCNICA

Dirección-Roberta Findlay
Guión-Roberta Findlay
Fotografía-Roberta Findlay
Música Walter-E.Sear/Michael Litovsky
Producción-Walter E.Sear

INTERPRÉTES

Amy Brentano (Linda)
Shannon McMahon (Alice)
Dan Erickson (Russ)
Marla Machart (Marnie)
Elisabeth Rose (Bonnie)
Cjerste Thor (Cara)

SINOPSIS

Un grupo de jóvenes estudiantes han de pasar la noche en una casona abandonada dentro de su ritual de iniciación. No hace mucho el lugar había regentado un burdel donde se produjeron una serie de muertes brutales. El objetivo es gastar una broma pesada a las chicas, pero entre los asistentes se ha colado un asesino.

Mediocre cinta que retoma por enésima vez la historia del asesino misterioso que acosa a un grupo de chicas a las que va asesinando en un puro y anodino ejercicio de slasher. En esta ocasión la nota de originalidad estriba en el hecho de que el lugar donde se desarrollan los acontecimientos está poblado por viejos fantasmas que nos recuerdan los terribles sucesos que acontecieron en la mansión no mucho tiempo atrás.

El mayor problema que arrastra la obra de Findlay es que es aburrida y tediosa, no pasa nada a lo largo de la mayoría del metraje, mientras vemos a las protagonistas deambular por el lugar y siendo asustadas por las bromas preparadas con anterioridad para hacerles la novatada. Únicamente los últimos veinte minutos se acercan a un tipo de cine slasher tremendamente activo en la década de los ochenta y por reiterativo carece de la capacidad de sorpresa que debiera.

Hay una gran carencia de calidad en todos los aspectos de la película. Un montaje nefasto con cortes muy marcados, una banda sonora estridente y molesta y como no, unas interpretaciones de saldo a cargo de grupo coral donde todos los actores resultan especialmente irritantes.

Con estos mimbres resulta imposible hacer un producto con un mínimo interés para el espectador, que es lo que le sucede a Blood sisters, que ni tan siquiera aguanta un primer visionado sin caer en el más absoluto aburrimiento.

Para ver con el botón del mando a distancia en la mano.

Escena: La secuencia final, porque es la única bien resuelta y porque supone el final de tan aburrida propuesta.

Lo mejor: La idea de los fantasmas reviviendo sus experiencias en la casona.

Lo peor: Roberta Findlay es un ejemplo de polivalencia, intentando abarcar demasiados campos (dirige, escribe, monta, fotografía) y siendo el resultado final bastante mediocre en todos y cada uno de ellos.

Curiosidad: El prólogo bebe directamente del conocido y celebrado primera escena de La noche de Halloween (1978) donde la cámara subjetiva hace la vez de asesino.

Valoración: 2/10

RYAN NICHOLSON



Director Canadiense convertido en último referente de un tipo de cine de serie Z donde el mal gusto es la seña de identidad.

Antes de dedicarse a la escritura de guiones y dirección, Nicholson ya se había labrado un nombre propio como experto en efectos especiales y de maquillaje. Dentro de esta labor destacar sus colaboraciones en series como Expediente X, Stargate o Sobrenatural y películas como Las crónicas de Riddick o Blade Trinity entre un ingente trabajo en esta área.

El cine de Nicholson contiene una serie de constantes cuyo fin último es la provocación, y para ello no escatima en medios: violencia de niveles exacerbados, sexo explícito, escatología, lenguaje obsceno… las películas del director canadiense son fácilmente identificables además por un look kitsch, atemporal y en cierta medida onírico, donde fotografía la realidad actual bajo un prisma muy personal. Todo ello sujeto a unos presupuestos muy bajos, pero que sin embargo, y como no podía ser de otro modo, permitan mostrar en sus films unas secuencias donde los trucajes están realmente bien resueltos.

Suele repetir con los actores en diferentes producciones, siendo Dan Ellis su actor fetiche. En lo que se refiere a los personajes que dibuja en los guiones su constante es la degradación, no hay héroes en sus cintas y todos sus personajes muestran comportamientos censurables. Sus películas suelen estar repletas de diálogos absurdos donde el insulto es la base de los mismos.

Su filmografía la componen hasta el momento los siguientes títulos:

Torched (2004)
Live Feed (2006)
Gutterballs (2008)
Hanger (2009)
Star vehicle (2010)
Famine (2011)

Un director no apto para todo tipo de públicos, de hecho su cine está dirigido a una minoría sin complejos a la hora de sentarse a disfrutar en una butaca de cine de hora y media de brutalidad y mal gusto, en lo que sería el equivalente de John Waters (por lo escatológico y degenerado de su propuesta) en el cine de terror.

GUTTERBALLS (Gutterballs, 2008) 95´





“I warned you not to bowl tonight”

FICHA TÉCNICA

Dirección-Ryan Nicholson
Guión-Ryan Nicholson
Fotografía-Mark Atkins
Música-Patrick Coble/Gianni Rossi
Producción-Michelle Grady/Dan Walton/Roy Nicholson

INTERPRÉTES

Alastair Gamble (Steve)
Mihola Terzic (Sarah)
Nathan Witte (Jamie)
Wade Gibb (Joel)
Candice Lewald (Lisa)
Jeremy Beland (Ben)
Dan Ellis (BBK)

SINOPSIS

La bolera Xcalibur es frecuentada por dos cuadrillas de jóvenes enemistadas entre ellos. Una noche, tras una partida que acaba en trifulca, Lisa, una de las chicas, vuelve a la bolera donde es brutalmente violada por los miembros del grupo rival. Al día siguiente, cuándo los jóvenes vuelven a encontrarse retándose a una partida de bolos, comienzan las muertes.

La obra más conocida de Ryan Nicholson, el último enfant terrible del cine más casposo y brutal, es Gutterballs, cinta que recoge todas y cara una de las señas de identidad del director canadiense, a saber, violencia extrema, escatología, personajes odiosos, sexo explícito… Sin embargo en este caso es de agradecer que la suma de todos estos elementos de negatividad sean incluidos en la cinta con todas las consecuencias y sin dobles intenciones, la película es lo que es y no intenta ser otra cosa.

Gutterballs es una oda al bizarrismo extremo que crea tanto acérrimos defensores como escandalizados detractores. Mezcla de géneros, con una violencia gráfica y sexual solo apta para estómagos curtidos (parejas asfixiadas mientras practican sexo oral, penes mancillados con una navaja, cabezas reventadas, decapitaciones…), donde destacan unos trucajes estupendos (Nicholson trabajó como artista de efectos especiales) y una banda sonora popera que inunda la pantalla en contraposición con el lenguaje obsceno (en versión original la palabra más repetida es fuck) utilizado por los protagonistas.

Gutterballs también tiene sus errores, el guión es muy justo (a pesar de ser un más que correcto ejercicio de slasher donde el mundo de los bolos está estupendamente utilizado en cada una de las muertes) los diálogos son estúpidos, al igual que los personajes, cuyas reacciones son ilógicas y sin sentido. En este aspecto, a Nicholson le habría faltado dar un envoltorio de humor (obviamente negrísimo) al conjunto, lo que habría enmascarado mejor desde las actuaciones hasta las reacciones de los personajes.

Una oda al exceso y al consciente mal gusto y que lleva a la hipérbole más absoluta los postulados del slasher. Horrorizará a quien piense va a ver la enésima versión de Viernes 13 (1980) y encantará a quien quiera disfrutar de un cine sin prejuicios ni dobles morales (y con estómago para las barbaridades rodadas por Nicholson).

Escena: Difícil elegir entre un recital de muertes tan desagradables como brutales, pero por original y bien rodada nos quedamos con la forma de morir de la pareja que está haciendo el 69 en los lavabos.

Lo mejor: Ryan Nicholson no se queda a medio camino y es consecuente con su propuesta de inicio a fin.

Lo peor: Los personajes son en su totalidad unos idiotas demasiado caricaturizados para sentir algo de empatía por lo que les sucede.

Curiosidad: Entre todas las carátulas diseñadas para la película hay sonoros homenajes a cintas como Maniac (1980) o La noche de Halloween (1978) entre otras.

Valoración: 7/10

REPOSEIDA (Repossessed, 1990) 80´





“The devil´s back. But he´s nevar dealt with an Exorcist like this”

FICHA TÉCNICA

Dirección-Bob Logan
Guión-Bob Logan
Fotografía-Michael D. Margoulies
Música-Charles Fox
Producción-Jean Higgins

INTERPRÉTES

Leslie Nielsen (Padre Jebediah Mayii)
Linda Blair (Nancy Aglet)
Ned Beatty (Ernest Weller)
Anthony Starke (Padre Luke Brophy)
Lana Schawb (Fanny Ray Weller)

SINOPSIS

1973. Un brutal exorcismo acaba de producirse, librando el padre Mayii a una niña del espíritu de Satanás. Diecisiete años más tarde, Nancy, aquella niña socorrida tiempo atrás y ya adulta, vuelve a presentar síntomas de estar poseída. Y nuevamente se verá obligada a ser exorcizada, aunque esta vez bajo los focos de la televisión.

Tontorrona comedia que se inspira en la obra maestra El exorcista (1973) para construir un recital de gags y chistes fáciles. Tomando como ejercicio de imitación la comedia denominada slapstick (y que tiene en Aterriza como puedas su más logrado referente), la cinta, escrita y dirigida por el ineficaz Bob Logan es una suma continua de bromas gráficas, juegos de palabras y situaciones absurdas, en un conjunto que no deja tiempo al espectador un solo segundo sin mostrar uno de estos chistes.

El principal problema es que la mayoría de estas bromas son demasiado facilonas y sin gracia, no hay calidad en el resultado final y la acumulación de chistes no los hace mejores.

Solamente la presencia de Leslie Nielsen salva a la cinta del desastre total, dando empaque al conjunto final y haciendo esbozar una sonrisa con solo verle gesticular. Su actuación es lo que hace merezca la pena dar una oportunidad a la película.

Destacar como la cinta se adelantó al fenómeno de los reality shows tan en boga en los últimos años, con la idea de retransmitir en directo por televisión el exorcismo, pudiéndose extraer una crítica a este tipo de programas donde se prima el morbo frente a otros valores y principios.

Una comedia nacida a raíz del éxito de Agarralo como puedas (1989) y que hay que ver con el cerebro en stand by.

Escena: El número musical final con Nielsen imitando a varios cantantes de la categoría de Elton John o Michael Jackson.

Lo mejor: Leslie Nielsen, su sola presencia soporta estoicamente toda la película.

Lo peor: Para una película de este género lo peor que le puede pasar es no hacer gracias, y eso mismo sucede con Reposeida en demasiadas ocasiones.

Curiosidad: Linda Blair, la actriz que da vida a Nancy, fue la encargada diecisiete años atrás de interpretar el papel de Reagan en la citada El exorcista, quedando encasillada para el resto de su carrera tras su impactante debut cinematográfico. Reposeida le permitió reírse de si misma y del rol que la lanzó a la fama.

Valoración: 4/10

DARK FLOORS (Punainen liitu, 2008) 81´





"The fear is here”

FICHA TÉCNICA

Dirección-Pete Riski
Guión-Pekka Lehtosaari
Fotografía-Jean Noel Mustonen
Música-Ville Riipa
Producción-Markus Selin

INTERPRÉTES

Noah Huntley (Ben)
Dominique McElligott (Emily)
William Hope (Jon)
Leon Herbert (Rick)
Skye Bennett (Sarah)
Ronald Pickup (Tobias)
Philiph Bretherton (Walter)

SINOPSIS

Un grupo de personas se encuentran en el ascensor de un hospital. Al llegar a la planta indicada y abrirse las puertas del elevador se encuentran con que los pasillos del centro médico se encuentran vacíos. Caminan intrigados por el edificio tratando de averiguar que es lo que ha pasado cuándo descubren que no están realmente solos.

Dark floors se erige como el largometraje oficial de la banda de rock Finlandesa Lordi, pasando así del mercado musical al cinematográfico y ampliando su radio de acción. La película de Pete Riski traslada al terreno del largo algunos elementos que ya se habían manejado en el corto Lordí´s The Kin (2004).

De esta manera, el presente título manifiesta los mismos puntos fuertes y lagunas que presentaba el mediometraje de Laurie Haukkamaa, siendo en el terreno técnico donde la película presenta sus mejores aciertos. La ambientación está bien resuelta y a pesar de lo que pueda parecer con la utilización de un único escenario como medio de abaratar la producción, no se escatima a la hora de llevar a buen puerto una ambientación onírica cercana al mundo de los videojuegos (Silent hill o Alone on the dark).

La cinta pretende ofrecer un ejercicio de género maduro, abordando para ello la historia sin caer en estereotipos más allá del plantel de personajes principales (el padre sacrificado, la niña autista, la enfermera amorosa, el personaje negativo, el encargado de seguridad como tipo de acción…). Así Riski apenas utiliza la sangre, sustentándose en el suspense y el citado ambiente opresivo para lograr llegar a inquietar al espectador.

Pero todas las buenas intenciones y medios utilizados para alcanzar los objetivos planteados se frustran por una dirección sin nervio y que no consigue en ningún momento un ritmo adecuado. También hay que citar en el aspecto negativo un guión que no sabe desarrollar la base argumental (ideada por el propio grupo musical), creando un batiburrillo de ideas que en última instancia pueden no ser bien entendidas por el espectador, lo que provoque una sensación de sinsentido en el final.

Primera y última (de momento) incursión de Lordi en el terreno del cine, cuyo resultado final es una especie de quiero y no puedo, a pesar de contar, a la hora de llevar a buen puerto la película, con el mayor presupuesto manejado para una cinta de terror rodada en Finlandia.

Escena: La persecución de Awa a lo largo de los pasillos del hospital a los asustados protagonistas y la destrucción de las cristaleras con cada nuevo grito de la criatura.

Lo mejor: Su intento de retornar a un tipo de terror oscuro y maduro, alejado del prototipo de slasher adolescente actual.

Lo peor: El director no sabe manejar un material tan amplio en su metraje, deviniendo en un ritmo por momentos anodino.

Curiosidad: Pete Riski, director de Dark floors, ya se había fogueado con anterioridad dirigiendo la mayoría de videos musicales de Lordi. A este respecto y viendo los resultados obtenidos, es mejor director de mini películas de tres minutos que de largometrajes.

Valoración: 5/10

LORDI´S THE KIN (Lordi´s the kin, 2004) 30´




FICHA TÉCNICA

Dirección-Laurie Haukkamaa
Guión-Laurie Haukkamaa
Fotografía-Jean-Noël Mustonen
Música-Joonas Siikavirta/Marko Kuusipalo/Jari Irmasto/Lordi
Producción-Leila Lyytikäinen

INTERPRÉTES

Amanda Thurman (Anna Henderson)
Bruce Marsland (Jonathan)
Delia De Giovanni (Julie Henderson)
Sirkka Runolinna (Madre de Anna)

SINOPSIS

Anna es una joven ilustradora que ha perdido a su madre en un trágico accidente. En su último trabajo aparecen una serie de monstruos. Estas criaturas comienzan a cobrar vida.

Mediometraje realizado a la mayor gloria del grupo de música Finlandés Lordi, ganadores del festival de Eurovisión del año 2006, y que en este caso no solo actúan como inspiración para dar vida a los monstruos que participan en la historia, ya que han participado en la elaboración del guión así como en la música de la cinta, esto último como no podía ser de otra manera.

La película presenta un nivel técnico superior a cintas de este estilo, evidenciando la amplitud de medios con los que se contó a la hora de abordar el rodaje, y las caracterizaciones de los diferentes personajes que representa cada uno de los miembros de Lordi (Mr Lordi, Amen, Ox, Otus y Awa) están muy bien logradas y cuidadas. Es precisamente en este aspecto, cada una de las apariciones de los monstruos, donde la cinta alberga sus mejores momentos.

Sin embargo, la historia es demasiado pretenciosa y confusa, quizás un acercamiento a un tipo de cine de terror más evasivo hubiera sido más apropiado al propio concepto de Lordi, que con sus letras y estilismos tratan de homenajear el genero de terror puro y duro.

Apreciable pero fallida muestra por parte de Lordi de acercarse a un género por el que sienten auténtica adoración. A ese respecto son mucho más apropiados sus videos musicales.

Escena: La muerte del vigilante.

Lo mejor: El plantel de monstruos.

Lo peor: La historia.

Curiosidad: Este mediometraje se incluyó como extra en el disco The monsterican dream, editado en 2004.

Valoración: 5/10

P, LA SEMILLA DEL MAL (P, 2005) 105´





“Ten cuidado con lo que deseas…”

FICHA TÉCNICA

Dirección-Paul Spurrier
Guión-Paul Spurrier
Fotografía-Rich B. Moore Jr
Música-Jack Arnold
Producción-Narongsak Vorrarutchaikul /Panupong Dangdej

INTERPRÉTES

Suangporn Jaturaphut (Dau)
Opal (Pookie)
Narisara Sairatanee (May)
Manthana Wannarod (Mamasang)
Amy Siria (Mee)
Supatra Roongsawang (New)

SINOPSIS

Dau vive con su abuela en un bosque donde aprende el poder de la magia para hacer frente a las adversidades de la vida. Cuándo su abuela enferma, Dau se ve obligada a trasladarse hasta la bulliciosa Bangkok para tratar de ganar dinero. Allí encuentra trabajo de gogó. No tardará en hacer un mal uso de sus poderes para lograr sus objetivos, lo que le ocasionará terribles consecuencias.

Torpe intento de trasladar a la pantalla grande una leyenda oriental que en manos del polivalente pero inexperto Paul Spurrier fracasa en su intento de replicar en Tailandia las claves del cine de terror Japonés.

La cinta es lenta, demasiado alargada y Spurrier ocupa demasiado tiempo de metraje en introducirnos en la historia. Así, hay toda una primera mitad que el director inglés dedica a narrar la llegada de la protagonista a Bangkok y su trabajo como gogó y prostituta, acercándose más a un drama que retrata el tema de la prostitución en Tailandia que a una cinta de género.

De esta manera, para cuándo se llega a la parte en la que Dau es poseída por el demonio que la obliga a matar, el espectador se ha desmarcado de la historia, que incluso en sus escenas más aterradoras resulta demasiado fría, sin alma.

Curioso caso el de esta cinta, ya que a nivel técnico está bien rodada, con una notable fotografía, una bella partitura musical y unas interpretaciones adecuadas. Sin embargo y a pesar de estos mimbres, Spurrier ofrece una historia aburrida y sin capacidad de enganche con el espectador, siendo el mayor responsable de esta circunstancia un guión tan pretencioso como fallido.

Terror de corte oriental, rodado en Tailandia y cuyos máximos responsables son ingleses, una mezcla que deviene en una película que no cumple las expectativas generadas.

Escena: La persecución de New por Dau en el centro comercial.

Lo mejor: Su factura técnica, fruto de hallarnos ante la cinta de terror Tailandesa con mayor presupuesto.

Lo peor: Desaprovecha una historia base que podía haber dado para mucho más.

Curiosidad: El director realiza un cameo como propietario del club de alterne en el cual trabaja Dau y que sufrirá las iras de esta tras ser humillada.

Valoración: 4/10

JAMES WAN



Con apenas treinta años, (Wan nació en Febrero de 1977) este director nacido en Malasia se ha convertido no solo en revelación mundial gracias al éxito de Saw, sino que ha cimentado una carrera sólida y con un estilo personal enmarcado abiertamente en la fantasía y el terror.

Se formó en la avalada facultad de cine del Instituto Real de Tecnología de Melbourne, donde coincidió y entabló amistad con Leigh Whannell, al que le une una estrecha relación profesional y personal. Juntos dieron forma a Saw, y juntos han repetido en varias ocasiones, la última de ellas con Insidious.

Wan ha cimentado su cine en la búsqueda de la originalidad, no tanto en lo que se cuenta, sino en como se cuenta. Acogiéndose a una forma de terror más cercana a la tradición, no se apoya en efectismos a la hora de asustar al espectador, sino que crea ambientes que van calando poco a poco. Incluso su obra más conocida, Saw (2004), está cimentada en el juego opresivo de Jigsaw con los protagonistas, más allá de las escenas explícitas. En ese aspecto es de alabar que Wan busque, y no siempre por el camino fácil, la incomodidad del espectador, base del buen cine de terror.

Con una breve carrera cinematográfica a sus espaldas, el director nacido en Kuching, ha mostrado su tarjeta de presentación en el género del terror, con unos resultados, sino excelentes, si notables. Será cuestión de ver como evoluciona su cine.

Su filmografía básica la componen los siguientes títulos:

Saw (2004)
Dead silence (2007)
Death sentence (2007)
Insidious (2010)

Actualmente Wan se encuentra con la postproducción de Castlevania, versión cinematográfica del conocido videojuego, auspiciada por Paul W.S.Anderson.

domingo, 10 de julio de 2011

INSIDIOUS (Insidious, 2010) 98´





”The further you travel, the darker it gets”

FICHA TÉCNICA

Dirección-James Wan
Guión-Leigh Whannell
Fotografía-David M.Brewer/John R.Leonetti
Música-Joseph Bishara
Producción-Jason Blum/Oren Peli/Steven Schneider/Aaron Sims

INTERPRÉTES

Patrick Wilson (Josh Lambert)
Rose Byrne (Renai Lambert)
Ty Simpkins (Dalton Lambert)
Lin Shaye (Elise Rainier)
Leigh Whannell (Specs)
Angus Sampson (Tucker)
Barbara Hershey (Lorraine Lambert)

SINOPSIS

La familia Lambert acaba de mudarse a una nueva casa. Un día, durante un registro por el ático, Dalton, uno de los hijos de la pareja cae desde una escalera aparentemente sin consecuencias. Sin embargo pronto entra en un coma profundo. Paralelamente a este hecho en la casa comienzan a sucederse acontecimientos paranormales que obligan al matrimonio y sus hijos a abandonar la casa.

James Wan en la dirección y Leigh Whannell escribiendo el guión (y reservándose un papel tal como ya hiciera en la conocida Saw) repiten tras varias experiencias cinematográficas juntos en una película que trata de actualizar los cánones del cine de fantasmas basándose para ello en la vuelta a los orígenes. Para ello, director y guionista se olvidan de la sangre y los efectos especiales abusivos para mostrar una película que sustenta su principal virtud en la sencillez de los recursos presentados a la hora de asustar.

La cinta de Wan tiene en Poltergesit (1982) su mayor influencia (la idea de la médium y sus dos ayudantes), aunque hasta en este hecho el guionista sabe dar una vuelta de tuerca para desmarcarse de la cinta de Hooper y personalizar la historia. Parece una película sobre casas encantadas, pero finalmente no es así, parece una historia de fantasmas, pero va un paso más allá.

Este esfuerzo por desmarcarse del prototipo de cine de terror actual es de agradecer, aunque bien es cierto que la película presenta una última parte demasiado pirotécnica que desluce el camino recorrido hasta ese último acto, camino sustentado en tratar de asustar al espectador mediante efectivos sustos bien integrados, una música adecuada y, especialmente, una atmósfera que va calando poco a poco en el espectador hasta imbuirle de las sensaciones vividas por la pareja protagonista.

Aunque no termina de romper y presentarse como la gran película que pudo ser, Insidious es un apreciable intento de aportar algo nuevo que es de agradecer en los tiempos que corren, y que conforman al tandem Wan-Wannell como un competente dúo dentro del género de terror.

Recompensa final para los que gustan de ver acabar los títulos de crédito finales.

Escena: Elise va mostrando a Josh una serie de fotografías de cuando era un niño, en las cuales puede apreciarse como un ente espectral va acercándose cada vez más al chico.

Lo mejor: La atmósfera lograda, especialmente en los dos primeros actos.

Lo peor: La pareja protagonista es totalmente prescindible dadas sus interpretaciones, que aunque esforzadas, son bastante limitadas.

Curiosidad: Guiño para los seguidores de la franquicia de Saw con el conocido jijgsaw dibujado en la pizarra de la clase de Josh Lambert.

Valoración: 7/10

martes, 5 de julio de 2011

EVIL ED (Evil Ed, 1997) 91´





“It´s a no brainer”

FICHA TÉCNICA

Dirección-Anders Jacobson
Guión-Anders Jacobson/Göran Lundström/Christer Ohlsson
Fotografía-Ander Jacobson
Música-Henrikson & Lindh
Producción-Göran Lundström

INTERPRÉTES

JohanRudebeck (Edward Swenson)
Per Löfberg (Nick)
Olor Rhodin (Sam Campbell)
Camela Leierth (Mel)
Cecilia Ljung (Barbara)

SINOPSIS

Edward Swenson es un apocado y meticuloso montador de cine a quién le envían a la sección de gore de la productora en la cual trabaja para que se encargue de editar la saga más fructífera de esta sección. Poco a poco se verá imbuido por la violencia que salpica las cintas sobre las que está trabajando, hasta el punto de volverse totalmente loco.

Producción sueca de finales de los noventa que para ser prácticamente amateur presenta una buena factura tanto a nivel técnico como de efectos especiales. Valorar el esfuerzo por parte de sus creadores a la hora de presentar un producto final digno, con una fotografía aunque reiterativa cuidada y cierto estilo en la planificación de las tomas.

En definitiva se trata de una agradable cinta enmarcada abiertamente en el género splatter y que bebe de exitosas cintas dentro de esta variante como Mal gusto. Además son varios los guiños a otras cintas del fantástico mediante nada sutiles inserciones de elementos como el demonio calcado de la película de Ridley Scott Legend.

Hay que acercarse a Evil Ed con cierta simpatía y libre de prejuicios ya que, a pesar de no sostener el ritmo inicial y final en una media parte más aburrida, el conjunto es entretenido, a lo que hay que unir unos efectos bien resueltos y creíbles, a pesar del exiguo presupuesto manejado.

Variante light de la inconmensurable Mal gusto, obra maestra del gore y con la que comparte un trasfondo de gamberrada.

Escena: El duelo con tintes de western entre Edward y el teniente del equipo de asalto de la policía, bien

Lo mejor: El acto final, el cual tiene lugar en el hospital en el que internan a un Edward totalmente enloquecido.

Lo peor: No aguanta el ritmo durante los noventa minutos, con algún que otro bajón en el mismo.

Curiosidad: Aunque hay influencias de diferentes títulos, la mayor fuente de inspiración del presente título se encuentra en la cinta de 1984 Posesión Infernal. Desde el mismo título (Evil Ed en lugar del original Evil Dead) pasando por diferentes posters de la saga, el nombre del director (Sam por Raimi, el director y Campbell por Bruce, protagonista principal) o el uso de la Steadycam tal y como ya había hecho Raimi en su obra novel.

Valoración: 6/10

sábado, 2 de julio de 2011

ED GEIN (Ed Gein, 2000) 85´





”Before Dhamer, before Gain, There was Ed”

FICHA TÉCNICA

Dirección-Chuck Parello
Guión-Stephen Johnston
Fotografía-Vanja Cernjul
Música-Robert McNaughton
Producción-Mark Boot/Hamish McAlpine

INTERPRÉTES

Steve Railsback (Ed Gein)
Carrie Snodgress (Augusta Gein)
Carol Mansell (Collete Marshall)
Sally Champlin (Mary Hogan)
Steve Blackwood (Brian)
Nancy Linehan Charles (Eleanor)
Bill Cross (George Gein)

SINOPSIS

Ed Gein vive una tranquila existencia en el pueblecito de Plainfield. Es un tipo simpático y tímido, de quien nadie puede sospechar oculta una mente enferma y degradada fruto de una infancia rodeada de violencia y totalmente sometida a una madre de moral enfermizamente religiosa y estricta.

Correcto biopic que trata de ceñirse a la realidad a la hora de narrar la vida de Ed Gein, que sin poder ser catalogado como asesino en serie (solamente mato a dos personas), se ha convertido en icono de referencia dentro de los serial killers por sus particulares perversiones (desenterraba cadáveres, construía enseres con restos humanos…).

Su director, Chuck Parello (especializado en cintas sobre asesinos en serie), nos ofrece una cinta que sin justificar los actos de Gein, si humaniza al personaje, siendo el mismo víctima de los abusos tanto a nivel físico de su padre como emocionales por parte de su madre (los que más le marcaron). A este hecho contribuye de manera vital un Steve Railsback que ofrece una interpretación que destaca por encima del resto de elementos ofrecidos por la cinta.

La película se centra en el Gein adulto y va construyendo el personaje mediante flashbacks que nos retrotraen a la infancia y juventud de este. Elimina el morbo con el que a priori pudiera jugar a la hora de mostrar tanto los asesinatos como las “aficiones” del personaje, siendo en este sentido una cinta que no ahonda en la violencia. Pero más allá de que la película sea más o menos violenta si que se hecha en falta un mayor efectismo a la hora de mostrar las perversiones de Ed, siendo en este aspecto una cinta poco valiente. Solo en determinados momentos (el hallazgo de los niños en casa de Gein por ejemplo), el director se atreve a ir un paso más allá.

Buen intento por parte de Parello de ofrecer un retrato fiel del asesino de Plainfield, lastima que esa misma objetividad en el relato de los hechos perjudique el resultado final, en el sentido que la cinta se limita a una narración fría de los acontecimientos. Aún así, se encuentra por encima de títulos de corte similar.

Escena: Por su relación con la iconografía posterior del personaje, el momento en que Ed sale vestido con restos de mujer sobre su cuerpo a bailar a la luz de la luna llena.

Lo mejor: La composición de Steve Railsback en el papel principal.

Lo peor: La película presente una factura demasiado formal y sin tamizar para poder retratar con exactitud el nivel de degradación del personaje de Ed Gein, le falta valentía.

Curiosidad: Steve Railsback, protagonista de la cinta, ya tenía experiencia a la hora de interpretar a otro personaje similar en el sentido de icono negativo cultural, Charles Manson en la cinta de 1976 Helter Skelter.

Valoración: 7/10